El estreno de Terra Luna 2.0, que pretendía ser una segunda oportunidad para el ecosistema Terra, no ha podido ser peor. Después de que se produjese el reparto por airdrop, los tenedores de la moneda la han vendido de forma masiva y con ello la caída alcanzó el 70% en cuestión de unas horas.

Según datos recogidos en CoinMarketCap, la moneda LUNA (la antigua ha pasado a denominarse LUNA CLASSIC) se estrenó en los 17,8 $ para después repuntar ligeramente hasta su máximo de 19,5 $. De ahí vendría una posterior caída que desplomó el valor hasta los 4 $, lo que supone el hundimiento del -77,5% de su valor.

Subidas posteriores han hecho que a día de hoy LUNA cotice en el entorno de los 8,70 $, lo que reduciría la merma a poco más del -50%:

Fuente: CoinMarketCap

Ese pequeño empuje vendría a demostrar que, aún a pesar de la caída inicial tan abultada, aún existen inversores interesados en comprar Terra LUNA criptomoneda.

Los antiguos inversores en LUNA dan la espalda al proyecto

Fijarnos en el poco tiempo transcurrido entre la recepción de los nuevos tokens LUNA y la venta masiva nos invita a pensar que la confianza que existe en la viabilidad del proyecto es escasa o nula.

Cabe recordar que Terra Luna 2.0 se iba a distribuir entre los antiguos tenedores de tokens LUNA con idea de resarcirles de la caída del 99,9% que tuvo el valor hace unas semanas y que incluso llegó a generar un divertido hashtag llamado #LunaBurn.

Tras el colapso de la stablecoin insignia de Terra, el USD Terra (UST), los poseedores del token LUNA votaron mayoritariamente a favor de la propuesta presentada por el creador del proyecto,Do Kwon. En concreto la medida fue aprobada por casi el 67% de los tokens en circulación de la red original de Terra, que como ya hemos indicado ahora cotiza bajo el nombre de Luna Classic (LUNC).

Esto no evitó que muchos de los antiguos partidarios del proyecto se deshicieran de la nueva Terra Luna 2.0 tan pronto como ésta cayó en sus manos, y eso que para el lanzamiento se contó con el respaldo de importantes exchanges como Binance, KuCoin, Huobi y Kraken. Probablemente los antiguos tenedores de LUNA buscarán otras alternativas para invertir en criptomonedas a largo plazo.

Según los datos de Terra Finder, el centro de control del ecosistema Terra, el ratio de staking se encuentra en el 54,2%, con un retorno anualizado del 13,57%. También sabemos que en la actualidad hay más de 92.360 wallets registradas en la plataforma.

La nueva Terra hereda los problemas de la antigua Terra

A pesar de haber salvado temporalmente el problema de viabilidad de Terra, la cúpula de TerraForm Labs con Do Kwon a la cabeza será investigada y posiblemente juzgada por mala praxis.

La Fiscalía del Distrito Sur de Seúl investigará los sucesos que condujeron al colapso de UST y Luna Classic para determinar si el equipo promotor participó en operaciones potencialmente fraudulentas, como la manipulación de precios, o si no cumplió con los procedimientos adecuados de cotización. De hecho se señala directamente a Do Kwon como artífice de una supuesta manipulación de precios que afectó tanto a UST como a LUNA.

Empleados de la empresa han afirmado que el elevado tipo de interés pagado por las plataformas internas de Terra, especialmente el llamado Anchor Protocol, sería parcialmente responsable de la desvinculación de UST y de su colapso final.

Al margen de esta investigación, un total de 76 inversores de Luna Classic han presentado quejas contra Kwon y su empresa. Al parecer, reclaman aproximadamente 5,5 millones de dólares en pérdidas derivadas de la caída del proyecto.

La inversión en criptoactivos no está regulada, puede no ser adecuada para inversores minoristas y perderse la totalidad del importe invertido.