No está siendo un otoño fácil para las acciones de Telefónica. Tras el asalto de los saudíes a través de STC, la empresa se enfrenta en estos momentos a una rebaja de valoraciones por parte de los analistas. El último en pronunciarse ha sido el banco británico HSBC, quien ha trasladado la recomendación de infraponderar reduciendo un 13% el precio objetivo desde el nivel previo que le otorgó.
La noticia provocó un gap inicial que llegó a registrar caídas de -3%. No obstante, con el paso de las horas el título pudo recortar la profundidad hasta llegar a niveles de -1,73%. Así, en cómputo de cinco días registraría una bajada del 2,73%, si bien en términos YTD estaría todavía en ganancias del +9,72%.
La posición adoptada por HSBC no sería aislada. En los últimos día otras entidades como Barclays o Alphavalue también han recortado el precio objetivo de las acciones de Telefónica, si bien es cierto que no han modificado las recomendaciones.
El consenso actual, basado en la opinión de 23 casas de inversión, está en mantener, con un precio objetivo promedio de 4,19 €. Esta previsión que otorga un potencial de revalorización superior al +12% desde niveles actuales. Aún así, si observamos la evolución del precio objetivo podemos ver una bajada pronunciada que viene de tiempo atrás.
La valoración más optimista daría a las acciones de Telefónica un precio objetivo de 5,10 €, lo que supone un potencial de crecimiento de +32% desde niveles actuales. En sentido contrario, la peor valoración sitúa a TEF en 2,70 €, equivalentes a una caída del -27% desde los niveles actuales.
El futuro se juega en el Investors Day
El próximo 8 de noviembre tendrá lugar el Investors Day coincidiendo con los resultados del tercer trimestre. Ese días es clave porque, entre otras cosas, se presentará el plan estratégico 2023-2026. Con él, la empresa quiere dar un cambio de rumbo a su actual situación.
El CEO de la compañía, Álvarez-Pallete, tiene por delante el reto de acabar con la racha de caídas en ingresos que acumula en los últimos años. Sólo en el ejercicio anterior ya se produjo una caída de -2.000 millones de euros, un -4,68% frente al resultado previo.
Brasil se convierte en el balón de oxígeno de Telefónica
No obstante lo anterior, conviene decir que a pesar de la compleja situación que atraviesan las acciones de Telefónica, también hay algunos catalizadores que invitarían al optimismo. Podemos enumerar como destacados los siguientes:
- La filial brasileña de Telefónica ha cosechado una revalorización YTD superior al 20% y, a diferencia de su matriz, está viendo continuas mejoras de recomendación por parte de los analistas. Además, está inmersa en distintos programas de remuneración al accionista, que van desde recompras de acciones hasta incrementos en el reparto de dividendos.
- Telefónica Tech, la división tecnológica del grupo, podría dar la entrada a nuevos inversores para incrementar su productividad y tamaño. Este negocio ha logrado incrementar sus ingresos un +39% interanual sólo en el primer semestre del año, y poco a poco se convierte en un pilar fundamental de los ingresos futuros.
- La empresa ha puesto en marcha un ambicioso plan de reducción de costes que, entre otras cosas, contempla un plan de bajas incentivadas y un programa de eficiencia de inmuebles. Con ello se pretende, entre otras cosas, reducir una deuda neta de más de 27.000 millones de euros.
Será preciso esperar al 8 de noviembre para ver si éstos y otros argumentos que esgrima Álvarez-Pallete son suficientes para cambiar la perspectiva de la compañía.
Evolución de las acciones de Telefónica
Aunque ya hemos indicado que TEF acumula saldo positivo en su cómputo YTD, lo cierto es que todavía presenta una merma del -50% al respecto de los niveles pre-pandemia. Se ha instalado una tangencial alcista sobre el trazado actual. Aún así, la pendiente resulta un tanto endeble y no advierte de fuertes crecimientos a corto plazo.
Acercándonos al actual ejercicio, vemos como el valor ha perforado las medias móviles a 50, 100 y 200 sesiones. El RSI por su parte nos muestra una situación de debilidad. Pues está situándose en la franja regresiva y sin visos de marcar un nivel de sobreventa que pudiere revertir la tendencia en un rebote.
En caso de trazar una proyección, la extensión de Fibonacci nos ofrece oportunidades si vemos a TEF rompiendo la resistencia de 3,95 €. A partir de ahí, el siguiente punto clave estaría en 4,19 €.
La entrada saudí, en espera
Uno de los elementos que mantiene el vilo a la empresa es la toma de poder de Arabia Saudí en la compañía a través de la empresa pública STC. El pasado mes de septiembre se desveló que los saudíes se habían hecho con el 9,9% de la compañía a través de una operación cifrada. en 2.100 millones de euros. El movimiento, al parecer, se había gestado mediante la adquisición del 4,9% en acciones directas y otro 5% en derivados con TEF como subyacente.
Dado que Telefónica es una empresa de valor estratégico, el gobierno debe de autorizar la entrada de STC y garantizar que ésta no tenga ninguna repercusión en la seguridad del país. Se sabe que las conversaciones están avanzadas pero, en tanto que el gobierno actual está en funciones y que la guerra en Israel ha puesto el foco en los países árabes, el proceso se ha situado en punto muerto.