El gigante norteamericano de los procesadores gráficos, NVIDIA, presentó el pasado día 8 de Septiembre su nuevo procesador NVIDIA H100 Tensor Core GPUs, con el cual pretenden dar un fuerte empuje a sus ventas y por ende a sus acciones.
Como empresa tecnológica que es, NVIDIA precisa del éxito en sus departamentos de desarrollo e innovación para lograr que la fuerte competencia del sector no melle su competitividad. Recordemos que NVIDIA permanece en una eterna pugna por el segundo puesto con el también norteamericano AMD.
Un respiro necesario para las acciones de NVIDIA
El 2022 no está resultando un camino de rosas precisamente para NVIDIA en bolsa. Desde el 1 de Enero las acciones de NVIDIA han caído un -52 %, yendo de 301,21 $ por acción hasta el umbral actual de los 140 $, tal y como podemos ver en su cotización:
Detrás de semejante caída se encuentran varios factores de inestabilidad propios que se han sumado a la mala tónica que en general han mostrado los mercados de valores, con especial saña en aquellos valores denominados growth donde se enclavaría NVIDIA.
En primer lugar, en Julio tanto NVIDIA como Intel anunciaron que iban a llegar unos meses complejos en lo referente a la venta de microprocesadores, lo cual lo supuso un mazado tanto para sus acciones como para la previsión del sector.
Por si no fuere suficiente, hace unas semanas se supo que el gobierno estadounidense quería vetar la venta de chips a China, cuestión que afectaba de lleno a la cotización de NVIDIA y también a la de AMD.
Además, cabe señalar que la empresa está un tanto intranquila por la escalada de tensiones en Taiwan, lo cual es lógico habida cuenta de que la taiwanesa TSMC es uno de los principales proveedores con los que trabajan NVIDIA.
Características del nuevo “superchip”
El chip que presentó en exclusiva la compañía hace unos días es el H100 Tensor Core GPU, una familia de potentes procesadores pensados especialmente para centros de datos que interfieran con IA y supercomputadoras especializadas en la detección y el diagnóstico de imágenes, modelos de lenguaje y demás.
Comparada con su best seller, el chip A100, en el H100 vamos a ver cómo la velocidad de computación de éste se multiplica x4,5 (tal y como arrojaron las pruebas técnicas realizadas) convirtiéndose así en un dispositivo difícil a batir por la competencia:
Pero vamos a lo que nos interesa, ¿cómo afectará el lanzamiento del H100 a la cotización de NVIDIA? Ciertamente el escenario sigue siendo complejo para este sector en estos momentos, sin embargo los analistas son optimistas de cara a las posibilidades que está desarrollando la compañía.
Las acciones de NVIDIA en el muy corto plazo han respondido positivamente a la noticia, produciéndose una reversión el mismo día de la publicación y recuperando valor desde los mínimos anuales en que nos encontrábamos:
No es para menos ya que tan sólo unos días antes Intel había anunciado a bombo y platillo que su nueva tarjeta Intel Ponte Vecchio doblaba en velocidad a la A100 de NVIDIA. El hecho de que la H100 de NVIDIA recoja hasta un x4,5 de rendimiento haría que la pieza de Intel quedase muy por detrás incluso antes de pisar el mercado. Por supuesto, un motivo de alegría para las acciones NVIDIA.
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