C+Charge inicia quema semanal de tokens, mientras su preventa supera los 1.74 millones de dólares

La cada vez más popular solución de carga para vehículos eléctricos (VE) impulsada por la tecnología blockchain, C+Charge (CCHG), informó a través de sus redes sociales que esta semana comenzó a quemar todos los tokens que no se asignen en cada etapa de su preventa.

La ICO de esta iniciativa está compuesta por ocho etapas y cada una dura hasta que sean asignados los CCHG disponibles o hasta un máximo de una semana. La primera fase de quema de tokens tuvo lugar este miércoles 22 de febrero a las 18:10 UTC.

Comenzó la quema de CCHG

Las fichas que se quemaron formaban parte de la etapa dos de su preventa, aquí puedes ver el hash de la transacción y sumaron un total de 36.658.291 CCHG, lo que corresponde a una parte importante de los tokens disponibles a partir del primer día de la preventa, de un total de suministro disponible de 1.000 millones.

La próxima quema de tokens, 35.815.716 CCHG pertenecientes a la etapa tres, tendrá lugar antes del final de la etapa cuatro, la cual está actualmente en pleno recorrido. “La quema es un método para eliminar criptomonedas del suministro en circulación transfiriéndolos a una dirección inactiva que solo puede recibirlos”, explican desde C+Charge.

Y agregan más adelante que “los inversores en el proyecto le están dando la bienvenida a esta estrategia porque aumenta la base de valor de las criptomonedas restantes. La preventa se divide en ocho etapas y hoy se encuentra en la cuatro; de la duración de cada etapa, de la segunda a la octava, es de una semana”.

Quedan pocos días para el cierre de la etapa 4 de C Charge

La etapa tres de la ICO de C+Charge finalizó hace dos días y, al momento de escribir este artículo, se habían recaudado poco más de 1.57 millones de dólares. El próximo aumento de precios, indican desde el proyecto, está a solo seis días de distancia (1 de marzo), lo que deberá tener en cuenta si está interesado, ya que el precio por CCHG subirá de 0,017 dólares a 0,018 dólares para la fase cinco.

“Los inversores que compraron nuestros tokens en la etapa uno de la preventa ya tiene un rendimiento nominal del 30 %. Cuando finalice la preventa, la rentabilidad habrá subido al 76,9 %”, apuntan desde C+Charge.

Desde el apartado publicitario, los encargados del proyecto aseguran que su empresa y su propuesta “encajan perfectamente en el mercado para ayudar a mitigar los problemas relacionados con el cambio climático, por lo que la demanda del token tenderá a crecer a medida que aumenta su visibilidad”.

Un dato que no puede pasar por alto, es que los inversores que se hagan con tokens de C+Charge en la etapa cuatro de la ICO, podrán obtener hasta 35 % en rendimientos nominales una vez finalice la preventa el 29 de marzo y si la criptomoneda en cuestión incrementa su precio una vez llegue a los exchanges, las ganancias se pierden de vista.

Así están divididas las preventas

Veamos un desglose completo de las etapas de preventa, para graficar aún mejor lo que se espera de cada una.

Los inversores deben tener en cuenta que existe un periodo de concesión de derechos al que se debe acceder obligatoriamente al comprar CCHG y que comienza solo al terminar la preventa.

Novedoso sistema de pago para estaciones de carga

A través de la asociación por parte de C+Charge con Flowcarbon, los propietarios de vehículos eléctricos podrán ganar créditos de carbono en forma de Goodness Native Token (GNT) cada vez que carguen en una de las estaciones con el logo de CCHG. “El GNT representa un crédito de carbono voluntario verificado, respaldado por las principales firmas de capital de riesgo a16z Crypto y Samsung Next, así como por el administrador de fondos Invesco”, exponen desde el proyecto.

Y añaden que “además de democratizar los créditos de carbono, C+Charge también resuelve el problema de las formas en competencia de medir los pagos. C+Charge proporciona un sistema de pago universal de fácil acceso que no requiere que los administradores de red instalen costosos equipos de puntos de venta: los conductores simplemente deberán usar el token CCHG para pagar”.

También, explican, proporcionará a los conductores de vehículos eléctricos una herramienta para encontrar rápidamente las estaciones que están en funcionamiento, al tiempo que brindará a los administradores de flotas una manera de monitorear y, en algunos casos, solucionar problemas de forma remota con estaciones de pago particulares.

“La forma en que los créditos de carbono están sesgados hacia las grandes empresas está frenando la adopción de vehículos eléctricos y el despliegue de la infraestructura de carga. Las grandes empresas suelen utilizar los créditos de carbono como un impuesto que están dispuestas a pagar para contaminar”, asumen desde C+Charge. Insistiendo en que “los ganadores en el sistema actual de créditos de carbono están destinados a ser aquellos que producen o usan bienes que permiten usar menos carbono, pero los conductores de vehículos eléctricos están injustamente excluidos”.

Estudios aseguran que la industria de los créditos de carbono tendrá un valor aproximado de 2.4 billones de dólares para 2027, por lo que abrirles acceso a los conductores de vehículos eléctricos a este mercado es un gran negocio.

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